¿Qué tipo de material es el latón?

El latón, al igual que el bronce, es una aleación obtenida a partir del cobre. El bronce incluye estaño como metal complementario, mientras que el latón es una aleación oxidable compuesta por cobre y zinc y, en casos especiales, otros metales en menor medida. Pero es precisamente la reacción al oxígeno lo que lo convierte en un material único y especialmente adecuado para conseguir resultados estéticos particulares.

¿Qué tipos de colores de latón existen?

El amarillo, el color clásico del latón pulido que se utiliza para molduras y accesorios de interior, no es el único color posible de la superficie. Con un porcentaje mínimo de manganeso, una vez expuesto al ambiente exterior adquiere un color marrón oscuro con vetas oxidadas que lo hacen absolutamente idóneo para la fabricación de luminarias de exterior.

Productos de iluminación de latón

Además del mobiliario, el latón, gracias a sus características físicas y químicas, es un componente clave para las líneas de producción de luminarias clásicas.

El latón es una aleación de muy alta maquinabilidad, apta para el mecanizado tras la fusión en crisoles y para la extracción tras el enfriamiento. Las láminas de latón, por ejemplo, se pueden cortar, doblar, perforar, tornear y fresar: en Moretti Luce, las técnicas antiguas se fusionan con los procesos tecnológicos de vanguardia para obtener productos de iluminación con cualidades estéticas y funcionales de alto rendimiento.

Como ya se ha mencionado, la producción de lámparas requiere también la definición de diferentes colores. Por ello, en los laboratorios de investigación y desarrollo de la empresa se estudian constantemente sistemas de coloración por oxidación natural que, antes de ser expuestos a los agentes atmosféricos, combinan armoniosamente con el diseño de estas luminarias.

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Propiedades y resistencia del latón

Gracias a su resistencia a la salinidad, el latón se utiliza, por ejemplo, para fabricar lámparas aptas para el entorno marino: la técnica de envejecimiento del latón, celosamente guardada según una receta perfeccionada a lo largo de los años, permite crear objetos únicos aptos para cualquier uso exterior.

Así, el latón utilizado para las lámparas de alumbrado exterior se somete a tratamientos específicos que prolongan su vida útil incluso a bajas temperaturas y en condiciones climáticas difíciles. La ventaja de este sistema es que, con el tiempo, la lámpara no necesitará ningún tratamiento de superficie ni mantenimiento.